La cerveza catalana: mercado, marcas y características
¿Cómo es el panorama cervecero catalán? ¿Qué destacamos de su mercado?
La cerveza es uno de los pilares de la cultura gastronómica catalana. ¿Pero qué podemos contar de las cervezas catalanas?
Índice de contenido:
Historia de la cerveza catalana
El origen de la cerveza en Cataluña se remonta a la segunda mitad del siglo XIX, en el contexto de la Revolución Industrial. Cerveceros provenientes de Europa se instalaron en las principales ciudades, como Barcelona, comenzando un tejido industrial a gran escala.
En los años siguientes la competencia fue creciendo, con las grandes marcas luchando por dominar el mercado. Sin embargo, la llegada de nuevas tecnologías y el acceso a ingredientes frescos fortalecieron la escena cervecera en la región, donde muchas marcas más pequeñas llegaron a encontrar su espacio.
Hoy en día, las cervezas industriales se aglutinan en grandes compañías, pero el panorama artesano catalán es muy amplio y diverso, con una gran variedad de microcervecerías que apuestan por la innovación en ingredientes, estilos y procesos.
Mercado y situación actual de la cerveza catalana
El mercado cervecero catalán tiene un marcado contraste entre lo industrial y lo artesanal.
Por un lado, están los pesos pesados, con Damm como reina indiscutible. La compañía controla en torno al 85% del mercado catalán en cuanto a cerveza industrial se refiere.
El segundo puesto lo ocupa Moritz, si bien la marca es propiedad de la cervecera aragonesa La Zaragozana, responsable de marcas como Ambar. En Barcelona, Moritz ocupa en torno a un 12% del mercado, mientras que en toda Cataluña el porcentaje baja hasta el 5 o 7%.
El resto de las producciones catalanas lo ocupan las microcervecerías y empresas más locales, que suman más de un centenar. El boom artesano en Cataluña comenzó hace más de 15 años, y ya supone el 30% de todas las cervezas artesanas en España.
En términos de facturación, mientras las grandes industriales generan cientos de millones de euros anuales, el sector artesanal catalán en su conjunto representa unos 25-30 millones de euros.
La cultura artesana local está muy arraigada, pues supone cerca del 3-4% del mercado total cervecero en la región. La media española ronda el 1.5%, así que los datos demuestran esa mayor conciencia o gusto por lo artesanal.
De hecho, otro dato muy interesante es que un 40% de los catalanes han probado alguna cerveza artesana, mientras que la media nacional se sitúa en el 25%.
En cuanto a preferencias, también nos llama la atención la lealtad a marcas catalanas, con una cuota muy superior que en otras regiones donde esa afinidad a marcas locales no es tan patente.
La Pilsener y otras variedades de cerveza lager son los estilos más consumidos con más del 80% del total, pero cada vez más se va abriendo la puerta a otras clases. Por ejemplo, las IPA y las Stout van ganando terreno entre las personas de 25 - 45 años, sobre todo en entornos urbanos donde es más fácil su acceso.
Festivales y ferias de cerveza en Cataluña
Sin ninguna duda, los festivales cerveceros en Cataluña contribuyen a esa expansión del mercado artesanal catalán, ayudando mucho en su difusión y descubrimiento.
El mayor referente es el Barcelona Beer Festival, que tiene un carácter anual y que cuenta con una feria paralela profesional. Con más de 35.000 asistentes y más de un centenar de marcas expositoras, supone el evento cervecero más importante del sur de Europa.
Por otro lado, varias localidades cuentan con ferias anuales ligadas a sus fiestas u otros eventos destacados, con un carácter más comedido. Por ejemplo:
- La feria de la cerveza artesana de Sant Boi, en el puente de diciembre o de la purísima.
- La fira de la Candelaria en Molins de Rei.
- Las fiestas de la primavera en L'Hospitalet de Llobregat.
- La Fira de la Cervesa en Olot, que en 2025 cumplió su séptima edición.
- La Mostra de Cervesa Artesana de Mediona, que ya cuenta con 20 ediciones.
- La Birra a má, el festival de la ciudad de Girona.
Estas ferias más locales suelen centrarse en productos locales, pero también cuentan con presencia de otras cerveceras del territorio nacional e, incluso, con referentes artesanos del extranjero.
Así que son, desde luego, ocasiones estupendas para conocer nuevas marcas y cervezas. ¡Y para coleccionar los vasos de cada edición!
Cervezas catalanas destacadas
Las marcas de cerveza en Cataluña desempeñan un papel fundamental en la identidad cervecera de la región, con varios buques insignia tanto en el apartado industrial como en el artesano.
Marcas industriales emblemáticas de Cataluña
Aunque el mercado industrial suele ir variando entre compras, fusiones y otras decisiones estratégicas, podemos hablar de tres grandes referentes identificadas con la cultura catalana:
- Damm: la empresa con mayor volumen, fundada en 1876 por un cervecero de origen alsaciano.
- Moritz: con el slogan de ser la primera cerveza de Barcelona, fue creada en 1856.
- San Miguel: desde hace años forma parte del grupo Mahou, pero tiene sus orígenes en la ciudad de Lleida y todavía se relaciona con la cultura local. De hecho, como dato curioso, algunas cervezas se comercializan en Cataluña bajo esta marca, teniendo mejores resultados por esa concepción local.
Cervezas catalanas artesanas
Con más de un centenar de cerveceras artesanas, nos hacemos eco de las que más conocemos por haberlas catado:
- Barcelona Beer Company: con varias líneas, como sus reconocibles cerdos voladores.
- Cervesa del Montseny: pioneros del movimiento craft catalán desde 2007, con una buena variedad de estilos. ¡Incluso sin gluten y ecológicos!
- La Pirata: con reconocimientos internacionales por sus creaciones atrevidas.
- Garage Beer Co.; que ha pasado de ser un brewpub a una referencia internacional.
- La Espiga: con un buen catálogo, un par de tiendas en Barcelona y un tap room. Desde 2012 en el Alt Penedès.
- Engorile: desde 2019, con mucho foco en la innovación. Por ejemplo, su Chingona, un homenaje a la cerveza mexicana nos llamó mucho la atención.